El mezcal se produce en casi todos los lugares de México donde hay
agaves. Son famosos los mezcales norteños y los de Oaxaca, pero casi no
hay lugar donde no se fabrique mezcal.
El mezcal tiene su mito: un rayo, al golpear un agave, fue quien hizo la primera
tatema. Es por eso se considera la bebida llegada del cielo. Para hacer
el mezcal, se asan las pencas y raíz, ya sea en hornos de leña o de gas,
o como barbacoa, enterrándolas en el suelo.

"Para todo mal mezcal, para todo bien también" Dicho popular.